Vencejo adulto

Los vencejos pasan con nosotros la primavera y el verano; comienzan a llegar a la península en el mes de marzo y se marchan en octubre. Hay que tener en cuenta que la fecha de llegada se puede adelantar cada año en función del clima y lo mismo ocurre con el mes de partida, que puede ser más tardío sobre todo en las ciudades del sur de la península.

Vencejo adulto recogido tras un temporal

Al inicio de la temporada, la mayor parte de aves que encontramos en el suelo son adultos. Suele ser el mes de marzo, cuando algunos adultos exhaustos tras la migración no encuentran nido y acaban cayendo por el desgaste. Esta situación se ve acrecentada por lluvias o mal tiempo en el momento en que los vencejos llegan a sus lugares de reproducción. También es habitual que encontremos adultos que han entrado en terrazas, portales y patios. Al buscar un nido o lugar para descansar acaban en estos lugares y pueden necesitar nuestra ayuda para salir. En estos casos, si el ave no lleva mucho tiempo atrapada, solo requerirá un poco de descanso y podremos liberarla nosotros mismos.

Meses en los que es más probable encontrar vencejos juveniles o adultos

Si el ave está parada y exhausta y no se recupera tras unas horas de reposo en una caja colocada en un espacio tranquilo, entonces necesita atención veterinaria. Probablemente está demasiado delgada como para poder levantar el vuelo y necesita un tiempo de cuidados y buena alimentación. En ocasiones, los vencejos en su desesperación por encontrar nidos se quedan atrapados en los conductos de extracción o en otras insfraestructuras y por tanto quedan muy debilitados cuando consiguen salir o los rescatamos.

También es muy común que en el primer mes de llegada de los vencejos, encontremos adultos con heridas, fracturas o luxaciones tras colisionar mientras volaban. Las fracturas en las alas o el coracoides son difíciles de tratar, sobre todo si se trata de una fractura abierta; esta tiene muy mal pronóstico. Una fractura cerrada debe ser evaluada por un experto para asegurar que tras su inmobilización existen posibilidades de que el ave pueda volver a volar. Una luxación es una lesión común en los vencejos tras un golpe. La luxación más habitual es de hombro y supone una dislocación de la articulación en mayor o menor grado.

Una luxación se hace visible cuando el vencejo no muestra señales de otra lesión, se encuentra aparentemente sano pero no levanta el vuelo. Entonces podemos apreciar un movimiento de alas asimétrico, que puede ser más o menos evidente según el grado de la lesión. Para observar el movimiento de aleteo del vencejo, lo cogeremos por las plumas de la cola, en el último tercio de las mismas y sin coger plumas del cuerpo del ave. Así el vencejo aleteará y por unos segundos podremos ver la potencia, fuerza y simetría del vuelo. No podemos descartar que un vencejo aparentemente sano y que no vuela, no padezca una infección y sea esta su principal problema.

Puede ser indicativo de un problema de salud que el vencejo tenga excrementos de color marrón oscuros, verde o que en lugar de un excremento compacto sea acuoso y diluido. Si sus mocosas bucales están pálidas y blanquecinas y si sus ojos están hundidos. Si pasa mucho tiempo emplumado y en reposo con los ojos cerrados. Ante la duda de una infección, los especialistas realizarán un frotis de sus mucosas bucales y un análisis coprológico.

En resumen

Algunas situaciones en que puedes encontrarte con un vencejo adulto y cómo actuar:

Si el ave está atrapada en un patio, en un extractor, una malla… la has rescatado y sabes que no lleva mucho tiempo atrapada o está visiblemente activa. Probablemente puedas liberarla en el momento.

Si el vencejo que has encontrado es adulto, no sabes cuánto tiempo lleva atrapado o encerrado, probablemente necesite cuidados antes de ser liberado. Puedes suministrarle algo de hidratación siguiendo esta información. Contacta con el centro de recuperación.

Si el vencejo que has encontrado ha sufrido una colisión o sospechas que la haya sufrido (estaba bajo un coche, una cristalera o en el borde de una carretera) recógelo y colócalo en una caja en un lugar tranquilo. En una o dos horas debería haberse repuesto y podrás liberarlo. En caso de no ser así, necesitará mayores cuidados y debes llevarlo al centro de recuperación.

Has encontrado un vencejo en tu portal o terraza después de un temporal. El ave estaba exhausta y no ha encontrado otro refugio. Seguramente podrás liberarla cuando haya pasado el temporal. Puedes ofrecerle agua y ponerla en una caja con una fuente de calor cerca mientras tanto.

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