Hace 30 años que La Cañada de los pájaros inició su proyecto de cría en cautividad de especies en peligro de extinción para tratar de salvar los humedales andaluces en primer lugar, y por supuestos, los de toda la península.
Cómo cada día de los humedales en Febrero, Plácido y Maribel liberan en su reserva concertada numerosos ejemplares de focha cornuda. Es su especie más emblemática, ya que de no ser por ellos, la focha cornuda ya se habría extinguido de nuestros campos. No contentos con eso, que nos es poco, en La Cañada de los Pájaros siguen trabajando día a día en la mejora del entorno y, sobre todo, de los humedales: frágiles ecosistemas y a la vez los más importantes del planeta, que regulan desastres ecológicos y son reservorios de vida.
Por eso este años, además de la suelta de focha cornuda y cerceta pardilla, han añadido una tercera especie invitada. Se trata del porrón pardo, el más pequeño de los patos buceadores cuya población está en declive en toda Europa y que en España pervive en unos pocos humedales levantinos, manchegos y andaluces. Ahora habrá, al menos, 30 ejemplares más de esta especie poblando nuestros humedales.